Vuelve a tu país

Las personas que me conocen, mi familia, mis buenos amigos, saben que para mi ha sido un gran esfuerzo mudarme a Taiwán.

Aquí en Taiwán he hecho algunos amigos y conocidos. Personas con las que quedo de vez en cuando e invito a mi casa a cenar por mi cumpleaños.

A estas personas les he enviado el enlace de mi primer vídeo en YouTube. Como es natural no le ha gustado a todo el mundo. A otros sí, al cien por cien y me han dicho que no quieren esperar más para ir a Barcelona. Pero la verdad es que me ha sorprendido la cantidad de personas que intentan justificar mis críticas a la ciudad. ¿De verdad es el camión de basura algo positivo? Quizás nunca hayan salido de Taiwán y no conozcan otros sistemas. ¿Realmente otros problemas mayores en otros países va a hacer que encontrar cucarachas en todas partes sea un placer? Claro que no. Una chica que conocí hace poco incluso me mando un artículo de la Wikipedia que según ella explicaba porque el agua del mar está sucia.

Creo que aquí la gente no está acostumbrada a que los extranjeros den su opinión. En general no están acostumbrados a que los extranjeros formen parte de Taiwán. Por eso la opinión o las ideas de un extranjero no importan. No somos parte de Taiwán. Lo propaganda pro-Taiwán lo vende de otra manera. Pero en realidad es así.

Cuando llevé al colegio a mis hijos y les dije que no sabían chino me recomendaron que los llevara a un colegio experimental en le que había más clases en inglés. Seguro que lo hacen con buena intención, pero mis hijos sabían menos inglés que chino, así que fue un consejo inútil. El fondo es el mismo: pasarle el problema a otro, deshacerse del extranjero, no cambiar nada, no adaptarse para ayudar. El cien por cien del esfuerzo es por parte del extranjero. En realidad es una forma de echarte de su sociedad.

Sobre todos los problemas que hemos tenido con los colegios ya escribiré otro día.

Ayer en una breve conversación en Instagram una amiga me soltó «si no estás contento aquí te puedes ir a otro sitio». La verdad es que me extrañó un poco porque le gustó mi vídeo y justamente ella ya me había comentado hace años que no le gusta el sistema de recogida de basura aquí. Sin embargo la amalgama de ideas de fondo es la misma: aquí es así, no podemos hacer nada, tú no puedes hacer nada, si te gusta, bien, si no te gusta te aguantas o te vas a otro sitio.

Es triste que la gente tenga esta actitud porque la gran mayoría de cosas se pueden cambiar sin mucho esfuerzo. O con mucho esfuerzo, da igual. Pero la gran mayoría de cosas se pueden cambiar. Quizás ellos no quieran hacer el esfuerzo y les molesta que alguien les recuerde lo vagos o conformistas que son.

Fue decepcionante tener que leer ese comentario de mi amiga. Quizás haya estado yo algo pesimista las últimas veces que la he visto, no sé. No creo, y desde luego no tanto como para invitarme a abandonar el país. Deshacerse de la voz discordante siempre es lo más fácil.


Publicado

en

por

Etiquetas:

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *